Sexualidad después del parto: hiperlaxitud vaginal, bienestar sexual y pérdida de sensibilidad

El embarazo y el parto constituyen una auténtica revolución en la vida de los futuros padres. Durante meses, el cuerpo de la embarazada se pone a prueba antes de darlo todo en el momento del parto.

El parto vaginal en condiciones que no favorecen el desarrollo fisiológico puede tener repercusiones en la vida sexual. La impresión de tener una vagina más ancha, la sensación de hiperlaxitud vaginal y la pérdida de sensibilidad durante las relaciones sexuales afectan al bienestar físico y psicológico de la persona con vulva y de su pareja. En este artículo, echamos un vistazo al bienestar sexual después del parto. Reeducación perineal, bolas chinas, vibradores, placer... A continuación te presentamos algunas formas, no exhaustivas, de redescubrir una sexualidad plena.

La vagina después del parto: ¿por qué se siente más estirada?

En una pareja heterosexual cisgénero, no es raro experimentar dificultades con la sexualidad posparto. La persona con vulva tiene que familiarizarse con nuevas sensaciones físicas, cambios en su anatomía e incluso el dolor asociado a la penetración. las parejas deben aprender a apoyar a su otra mitad en los cambios que experimenta su cuerpo, pero sobre todo debe reinventar su vida sexual, que a veces puede estar plagada de dificultades. Visualmente, la vulva puede tener un aspecto diferente y el tono alrededor del canal vaginal puede parecer más débil, dando la impresión de que la vagina es más ancha. El paso del bebé por el canal vaginal y el ensanchamiento de la pelvis durante el embarazo son la principal causa de estas sensaciones. Pero lo que realmente da la impresión de ensanchamiento vaginal es la pérdida de la tonicidad del suelo pélvico. Ésta ya había estado sometida a tensión durante los 9 meses de embarazo, y luego el parto vaginal supuso un esfuerzo aún mayor en esta zona. 

Aunque en realidad se dice de la vagina que es como una "cavidad virtual" (una cavidad sellada por la tonicidad muscular que rodea las paredes vaginales), la sensación de hiperlaxitud o ensanchamiento se atribuye esencialmente a la relajación de los músculos que rodean la zona vulvo-vaginal. La estimulación externa del clítoris puede estar sujeta a algunas fluctuaciones hormonales, pero sigue siendo esencialmente la principal fuente de placer.

Las sensaciones de placer interno pueden verse afectadas por esta hipo-tonicidad post-parto. Entre otras cosas, los músculos del suelo pélvico ayudan a controlar el músculo constrictor de la vulva que desempeña un papel clave en el esfuerzo constrictivo de las paredes vaginales. En ausencia del efecto de constricción, los bulbos y pilares del clítoris "flotan", por lo que la estimulación intravaginal resulta mucho menos placentera. Sin embargo, sería un error imaginar que la situación es irreversible. El placer sexual no consiste únicamente en tener una vagina perfectamente estrecha.

Es más, es totalmente posible recuperar sensaciones satisfactorias mejorando la tonicidad del suelo pélvico.

Hiperlaxitud vaginal: lo que debes saber

La relajación del perineo es responsable de la hiperlaxitud vaginal o vulvar. En una mujer joven y sana, esta situación suele durar de 6 a 12 meses como mucho. Pero a veces los trastornos persisten. Por eso es importante hacer todo lo posible para devolver la tonicidad al perineo. Y no sólo para la salud sexual. La reeducación perineal también es muy importante para la continencia urinaria y fecal y para prevenir el prolapso de la vejiga o el útero, que puede producirse después del parto.

La hiperlaxitud vaginal o vulvar produce:

• la pérdida de sensibilidad durante las relaciones sexuales con penetración o la masturbación con un juguete erótico vaginal,
• dolores durante la penetración (dispareunia),
• dificultades para mantener un tampón en su sitio,
  incontinencia urinaria, con o sin esfuerzo,
• gases vaginales, responsables a su vez de ruidos anormales durante el coito,
• infecciones vaginales frecuentes o cistitis, ya que la entrada de aire puede repercutir en la microbiota vaginal,
• prolapsos (descenso del órgano) en los casos más graves.

Reconectar con el placer después del parto: tratamientos y soluciones

Las bolas chinas son una excelente herramienta para volver a tonificar el pireneo postparto

Recuperar la tonicidad vaginal

Recurrir a la osteopatía para reposicionar la pelvis tras el parto puede ayudar a restablecer el suelo pélvico y, en última instancia, influir en la tonicidad vulvovaginal, de forma que se sientan más sensaciones durante la penetración. Al mismo tiempo, es importante seguir las sesiones de reeducación perineal prescritas al salir de la maternidad para restablecer una tonicidad muscular satisfactoria en la zona perineal. Sobre todo, deberá tener paciencia, ya que la situación no se resolverá en unos días. Si bien existe una realidad física en la laxitud vaginal, es sobre todo la forma de enfocar el sexo que proporciona placer durante la penetración. Es sin lugar a dudas, el momento de volver a las posturas del Kâma Sûtra o de salir de la rutina sexual explorando nuevas posibilidades.

Combinar negocios y placer mediante el uso de bolas chinas y conos vaginales 

Someterse a una reeducación perineal con un profesional de la salud no significa que no puedas hacer algo por tu cuenta. ¿Has oído hablar de las bolas chinas? Se trata de una mezcla entre un juguete sexual y un instrumento de entrenamiento perineal, ideal para reforzar el suelo pélvico y, por tanto, mejorar el placer sexual. Pero hay que saber utilizarlas para obtener buenos resultados. No te asustes, ¡aquí te lo contamos todo!

Existen diferentes tipos, algunos son unas simples bolas con un cordón, otros son progresivos y te permiten desarrollar el perineo gradualmente, adaptándose a tus capacidades. También puedes utilizar conos vaginales (los encontrarás aquí) que se basan en el mismo principio, pero con un enfoque ligeramente más médico. También se conocen como bolas de Kegel. Divertidos y fáciles de usar, estos instrumentos también te permitirán redescubrir y controlar mejor la tonicidad de tu zona genital.

Recurrir a la vaginoplastia en los casos más graves

En la mayoría de los casos, basta con una reeducación perineal seria para restablecer la firmeza de la vagina y recuperar la plenitud sexual. Pero a veces la situación se ha deteriorado hasta tal punto que es necesaria una intervención quirúrgica. La vaginoplastia consiste en restaurar la estructura de la vagina tensándola y remodelándola mediante la reparación de las fibras musculares dañadas.

¡La vida es algo más que la vagina!

Por supuesto, es importante recuperar un perineo tonificado y percepciones vaginales reales, pero tu vida sexual no debe detenerse en este aspecto y es, sobre todo, una cuestión de complicidad y comunicación entre la pareja. El clítoris es la clave de la plenitud sexual y, por definición, la principal zona erógena de las personas con vulva, tanto si practicas el sexo en solitario, en pareja o en grupo. Para obtener las máximas sensaciones, diviértete redescubriendo este órgano esencial con tu pareja ¿Quieres darle un toque picante? ¿Por qué no pruebas un vibrador especialmente diseñado para el placer del clítoris? Existen distintos tipos, algunos incluso combinan la estimulación del clítoris con la penetración. En este artículo te presentamos todos los estimuladores de clítoris que te permitirán alcanzar el orgasmo.